Las plagas en cualquier cultivo suponen una pérdida de tiempo y producción. En el caso de las plagas en la industria azucarera no iba a ser menos. Podemos diferenciarlas en dos, las plagas que afectan a la remolacha y las que afectan a la caña del azúcar. La seguridad en el ámbito alimentario es fundamental, por lo que la actuación una vez detectada la plaga debe ser inmediata, existen varios bioservicios para garantizar esta seguridad.
Plagas en la remolacha
Rhizoctonia solani
Los síntomas principales se presentan en forma de pudrición lateral de las raíces y coronas. Presentan grandes heridas en las mismas zonas. En el mes de diciembre es cuando se comienzan a presentar los primeros síntomas. Los ataques son más fuertes en condiciones de sequía. La pérdida económica debida a esta plaga es alta. Se puede controlar esta plaga usando variedades de la remolacha más tolerantes a este tipo de ataque.
Cercospora/ Manchas foliares
El patógeno encargado de producir esta plaga es la Bercospora Beticola. Comienzan a aparecer manchas pequeñas y redondeadas, con el centro gris claro y el borde en un tono café rojizo. En alguna ocasión, cuando el ataque es fuerte, las manchas acaban secando parte importante de la hoja. Las hojas adultas son más débiles ante este patógeno que las nuevas.
En una rotación de cultivos corta es más probable que se de la infección ya que, este hongo, permanece fundamentalmente en residuos de cultivos anteriores. Es una enfermedad importante y que afecta sobre todo a áreas húmedas y cálidas, suponiendo una pérdida económica notoria.
Oidio
Una de las plagas más frecuentes causada por el patógeno Erysiphe Betae. Las hojas comienzan a cubrirse en la parte axial de una capa algodonosa de micelio gris blanquecino/blanco en forma de estrella. En un ataque potente las hojas se amarillean y posteriormente se secan. Este hongo avanza muy rápido llegando a cubrir todo el cultivo. El daño económico causado por este hongo es enorme debido al deterioro que deja en el cultivo.
Plagas en la caña del azúcar
Taladro
El taladro en la caña del azúcar es una plaga causada por larvas de color amarillo con manchas marrones que se convierten en mariposas una vez están situadas dentro de la caña. Realizan un agujero en la planta y salen hacia el exterior. Su control es muy complicado ya que avanzan a gran velocidad, por ello, el impacto económico es grandísimo.
Los pulgones
La mejor manera de combatir sus plagas es la limpieza de los viveros y cañaverales, usando aerosoles de extractos de humo e insecticidas especializados. No solo causan daño a la planta, sino que, además, la transmiten una enfermedad. Entre las plagas de la industria azucarera esta es una de las más comunes.
Salivazo de la raíz
Las raíces de la planta se echan a perder debido a esta plaga. Libera un líquido muy característico de color blanco esponjoso. Aunque deja la planta inservible para la industria, puede ser usada como forraje.
Cómo actuar si detectamos una plaga
De manera general, ya sea una plaga en el cultivo de la remolacha o en el cultivo de la caña del azúcar, la rapidez es crucial. Una vez hayamos detectado el problema, debemos poner una solución. Dependiendo del tipo de plaga que ataque, debemos buscar la manera más efectiva de acabar con ella. Los primeros pasos siempre serán podar la parte de la planta afectada y tener el mayor cuidado posible con la higiene. Si no sabes cómo hacerlo, lo mejor es que delegues esta tarea en profesionales del control de plagas.
